Llegaron los Cambios! Llegaron los Cambios! Llegaron los Cambios!

Llegaron los Cambios! Llegaron los Cambios! Llegaron los Cambios!

Mi siento tentado a gritar, tal y como se grita en la Habana cuando llegan los mandados. Pero después de analizar los “cambios” también es similar la reacción cuando llegaba a la casa y me daba cuenta que el carnicero me había tumbado unas libras de picadillo de soya. Ira e Indignación.

Los mencionados cambios que están supuestos a aliviar la vida del cubano no son más que una farsa. El gobierno de Raúl Castro ha logrado crear un espejismo de apertura y fortalecer su imagen de reformista en el exterior, sin mejorar las condiciones de vida reales del pueblo cubano. Si las ventas de DVD players están altas y las noticia de colas para compra de celulares dan la vuelta al mundo. Pero todavía no hay libertad de expresión, a pesar de las declaraciones de amor profesadas por Eusebio Leal a sus hijos, y muchos opositores todavía son encarcelados cada día.

Detrás de estos cambios es la asumpcion por parte del elite del PCC de en Cuba solo son necesarios cambios cosméticos, que le dieran al pueblo una idea de mejoría de vida. Vivo ejemplo de esto es la permisión a los cubanos a ser dueños de sus propias casas. Medida que beneficia directamente a los miembros del ejercito, asegurándose así su lealtad en tiempos difíciles. Esta ley también les asegura la propiedad a las elite del gobierno.

En Cuba se necesita mucho mas que la posibilidad de hospedarse en un Hotel o la de la compra de un DVD. Todas estas medidas son solo para comprar tiempo y demorar lo inevitable. Son necesarias la libertad de expresión y asociación, de elecciones multipartidistas, la libertad de empresas en resumen una sociedad donde el individuo pueda vivir a su máximo potencial.