Escrito del periodista cubano y miembro de la brigada 2506 Luis González-Lalondry.
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Bahia de Cochinos: 49 Años Después
Por Luis González-Lalondry
Hace 49 años, el 17 de abril de 1961, se llevó a cabo el histórico desembarco en Bahía de Cochinos, la invasión militar que pudo haber cambiado el destino de los cubanos y la historia misma de nuestro hemisferio, naturalmente si hubiéramos triunfado. Pero no fue así y hemos tenido que cargar con la derrota, aunque el fracaso de aquella operación fue producto de la Guerra Fría, los errores tácticos de Estados Unidos y su presidente John F. Kennedy y las pretensiones de la Unión Soviética de dominar el mundo mediante la odiosa doctrina del comunismo marxista-leninista, que a tiempo las fuerzas democráticas por cobardía no supieron frenar con coraje y valentía.
Para la historia de los pueblos medio siglo no es mucho tiempo, pero para los hombres y mujeres que participan en la historia misma, biológicamente es una eternidad. Y aquella hermosa gesta que comenzó con los hombres de Giussepa, luego se trasladó a las selvas de Panamá y después a las montañas de Guatemala, el tiempo ha transcurrido vertiginosamente, la vida se ha ido acabando y la dictadura que nos hizo arriesgarlo todo por la libertad de Cuba, sigue ahí, reprimiendo a los cubanos, asesinando a nuestros compatriotas y golpeando a infelices mujeres vestidas de blanco, con la misma crueldad con que lo hacían antes y después del 17 de abril de 1961.
Lo vergonzoso es que ya no se habla del desembarco en Bahía de Cochinos, como no se habla de Carlos Manuel de Céspedes, ni de Martí, ni de Maceo, ni de Máximo Gómez, ni de Ignacio Agramonte, ni de Flor Crombet. Para los cubanos del exilio los temas frívolos son más importantes. Juanes, Silvio Rodríguez, Pablo Milanés, Juan Formell y los Van Van, son regularmente el tema obligado en la prensa diaria, en los programas de radio o de la televisión de Miami, la llamada capital del exilio.
Vicente Méndez, Tony Cuesta, Juan Felipe de la Cruz, Luis Aurelio Nazario, Tony Izquierdo, Eusebio Peñalver, Rogelio González Corzo, “Francisco”, Porfirio Ramírez, son nombres de patriotas que no le dicen absolutamente nada a las nuevas generaciones, como no le dice nada la historia patriótica de hombres de la talla de Felipe Rodón, Vicente León, José Millán Velasco, Luis Oria Finalés, Omar Guerra, Osvaldo Piedra, Ovidio Camejo, algunos de los mártires de la histórica batalla en Bahía de Cochinos. No hemos aprendido de los norteamericanos, ni de los ingleses, ni de los franceses, ni de los judíos, que todavía 65 años después de terminada la Segunda Guerra Mundial, viven exaltando la historia del Holocausto y los seis millones asesinados por los nazis.
Es posible que este año, como en los anteriores, muy pocos recuerden venerar la fecha del 17 de abril y la histórica invasión a Bahía de Cochinos, la única vez que Cuba pudo ser libre por el esfuerzo de los propios cubanos, aunque la casona que se levanta en el 1821 SW 9 Calle en esta ciudad, esté llena de recuerdos de la guerra y el Monumento a los Mártires en la Calle Ocho y la 13 Avenida, en el suroeste de esta la capital del exilio, nos indique el camino del deber cumplido.
Como los aliados en Normandía, los ingleses en Monte Cassino, los norteamericanos en Guadalcanal y Filipinas, la Brigada de Asalto 2506 con mil quinientos hombres, hizo historia el 17 de abril de 1961 enfrentándose a un ejército de sesenta mil hombres, con la mejor artillería a su disposición, los pesados tanques Stalin y la aviación castrista intacta, después de los ataques el día 15 de abril a los aeropuertos de Columbia, San Antonio de los Baños y Antonio Maceo en Santiago de Cuba.
La victoria pudo haber sido de los cubanos y del mundo libre, si se hubieran cumplido los planes elaborados por la administración del general Eisenhower, pero para el presidente Kennedy era más importante asegurar su reelección cuatro años después, que consolidar la democracia en Cuba y perdimos aquella batalla, que pudo haber salvado a Cuba y al continente. Pero la historia está ahí y el mundo reconoce que el desembarco de aquel puñado de hombres de la Brigada de Asalto 2506 en Bahía de Cochinos, fue una prueba de valor y patriotismo que no ha podido ser superada en estos 50 años de lucha.
Los veteranos de aquel 17 de abril, que andamos con el pelo cano por las calles de Miami y por los caminos del mundo, arrastrando el dolor de vivir sin patria, 49 años después de aquella gesta libertadora, le rendimos este día homenaje a nuestros muertos, a los que cayeron para siempre, en Playa Girón, Playa Larga, San Blas, Pálpite y Yaguaramas y alzaremos nuestra vista al cielo para rezar un Padre Nuestro por nuestros hermanos de la Brigada de Asalto 2506 y por todos los que han muerto combatiendo por la libertad, para que Cuba se salve y los cubanos seamos definitivamente libres.
Luis González-Lalondry es periodista, escritor y combatiente de Bahía de Cochinos.
1 comentario:
Cuba después de Bahía de Cochinos
http://manchiviri.blogspot.com/
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